
Publicado: abril 15, 2025
Lo que parecía una esperanza viva para Liga Deportiva Alajuelense podría convertirse en una desilusión mayúscula. A menos de diez días de que el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) celebre la audiencia clave sobre el caso del club León de México, las recientes declaraciones del presidente de la FIFA, Gianni Infantino, dibujan un escenario poco alentador para los rojinegros.
Infantino, desde Atlanta, fue claro al afirmar que acatarán lo que determine el TAS, sin embargo, dejó entrever que la FIFA ya tiene un “plan B” si se ratifica la sanción que dejó fuera a León, campeón de la Liga de Campeones de Concacaf.
Según explicó, en caso de que el fallo del Comité de Apelación se mantenga firme, el ente rector del fútbol mundial estaría dispuesto a organizar un duelo de repechaje entre Los Angeles FC (LAFC), subcampeón del torneo, y el Club América, el mejor posicionado en el ranking de clubes de Concacaf. “La intención de la FIFA es que se juegue un partido entre esos dos equipos”, adelantó el dirigente.
Con esta jugada, Alajuelense quedaría completamente fuera del radar, pese a que en su momento figuró como uno de los clubes más opcionados para heredar el cupo mundialista si León no podía participar.
Una ilusión que se desvanece
El 23 de abril, Alajuelense presentará su caso en el TAS con la esperanza de que el organismo le dé la razón y lo considere como legítimo sucesor del lugar dejado por León. Sin embargo, las cartas parecen ya estar marcadas, y desde Zúrich el mensaje fue más que contundente.
El primer Mundial de Clubes con 32 equipos, programado para celebrarse en 2025 en Estados Unidos, sería una vitrina histórica para el fútbol costarricense, y los manudos veían en esta oportunidad un premio a su trayectoria reciente. No obstante, los intereses deportivos y comerciales de la FIFA parecen favorecer a clubes con mayor arrastre regional como el América o el LAFC, situación que levanta más de una ceja entre los aficionados nacionales.
¿Qué puede hacer LDA ahora?
La Liga aún puede presentarse con fuerza en la audiencia del TAS, donde deberá argumentar por qué le corresponde ese cupo. No obstante, ante las señales tan claras por parte de FIFA, el camino legal parece estar cuesta arriba.
Además, esta decisión podría sentar un precedente preocupante sobre cómo se toman las decisiones dentro del organismo futbolístico mundial, priorizando ranking y mercado sobre méritos deportivos.
En la afición manuda, la decepción ya se empieza a sentir, mientras el club sigue aferrado a un veredicto que podría llegar demasiado tarde… o simplemente ser ignorado.